Cada día nos encontramos en situaciones donde la generosidad se pone a prueba, en donde dar con desinterés resulta difícil. Es justo en ese momento donde el amor le gana la carrera al egoísmo.
Es entregarnos nosotros mismos con profundidad a los demás, que la forma en la que amamos y somos libres nos distingue ante el egoísmo.