Hay momentos que no me permiten pensar en el pasado
y otros, que no me dejan huir de él.
persiguiendo cada uno de mis pasos
pidiéndome volver.
Hay días en los que creo avanzar más que nunca.
y luego, vuelven las memorias
esas malditas que me obligan
a volver la mirada y no querer cambiar.
Ya no sé si depende de mí
o mejor dicho
de qué parte de mí
con la cabeza o el corazón.
¿Qué es lo que extraño tanto?
¿Por qué no me quiero ir?
No sé si es solo el miedo de avanzar,
de lo desconocido…
-suspiro-
Tarde o temprano tendré que moverme
mientras logro decidir
qué acción tomar
por cuál camino ir
Quizá solo necesito pensar.
o lo que me hace falta
en realidad
es dejar de pensar.
Y actuar.
Volver…
¿¡a dónde!?
volver a tomar el camino hacia delante
o el que me trajo hasta donde estoy.